La Agència Catalana del Consum, dentro de sus funciones está la de promover la formación de los agentes económicos que ponen en el mercado los productos y los servicios.
Para llevar a cabo estas actividades se realizan sesiones formativas con el objetivo de informar a los empresarios, comerciantes y prestadores de servicios de los requisitos de su actividad relacionados con los derechos y deberes de las personas consumidoras y usuarias a fin de evitar y prevenir las irregularidades detectadas en el mercado.
Asimismo, también se pretende fomentar entre los agentes económicos la mediación y el arbitraje de consumo como vías de resolución de los conflictos que puedan surgir con sus clientes-consumidores.
Estas actividades formativas son organizadas por la Agència Catalana del Consum y, en muchos casos, cuentan con la colaboración de los organismos públicos de consumo de las administraciones locales, o bien de las asociaciones empresariales o gremios sectoriales interesados.
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